Gracias por compartir, leer y ser parte de los testimonios de Fondacio. Te invitamos a revisarlos, reflexionar y compartir este sitio, para que más personas puedan sentir el amor y el cariño del Señor, a través de las palabras de todos los que componen Fondacio.
Como dice el libro de la Sabiduría, “hay tiempo para todo” y llegó el tiempo para mí, de ser llamada a ir más lejos, a las fronteras, a los pobres.
En 1980, fuimos invitados a vivir un Weekend A, en Punta de Tralca, de entonces CCN. Donald y yo quedamos alucinando. Veníamos de participar activamente, y por más de 15 años, en Encuentro Matrimonial y esta invitación a comprometernos con la “Ciudad”, nos pareció muy oportuna.
Encontramos ahí nuevas amistades, nuevas propuestas de entrega y una manera de descubrir a Dios dentro de nosotros y de cada uno. Dios estaba en los cantos, en las acogidas llenas de cariño, en los compartir de grupos chicos, en todas partes… especialmente en nuestro corazón.
Recibimos, entre los años 1980 y 2006, muchísimo, y también entregamos mucho, regalando tiempo, ideas, y nuestras propias experiencias de vida y de encuentro.
Como dice el libro de la Sabiduría, “hay tiempo para todo” y llegó el tiempo para mí, de ser llamada a ir más lejos, a las fronteras, a los pobres.
Como es Jesús, sabio, concreto e invitante, con otras personas también de CCN, hoy día, de Fondacio, nos llamó a servir en otros lugares. Esto ha sido una complementación maravillosa de todo lo vivido en CCN, lo aprendido, lo escuchado y lo compartido, porque nos hace ver el mundo de una manera más misericordiosa y a nosotros mismos como responsables de que lo sea.
Gracias Señor por el regalo de este camino, gracias amigos de Fondacio por tanto recibido y gracias a CCN que nos mostró como cada uno es responsable de que lleguemos todos a vivir en un mundo mejor.
Para los próximos 40 años, sólo le deseo a Fondacio, o mejor dicho a las personas comprometidas en esta misión, el “escuchar” a Jesús. El irá diciendo lo que quiere y lo que cada uno y todos debemos vivir. – Paula Claro
Soy testigo como el amor en el servicio pone de pie a las personas.
Doy gracias al Señor por el camino recorrido en Fondacio, por la pedagogía en el encuentro, la belleza, el canto, la oración, el acompañamiento, la diversidad que me permite reconocer en cada uno el rostro del Señor.
Ha sido un camino de conversión potente, de despojarme de la mochila de tantas cosas que no me ayudaban a ser yo verdaderamente, de hacerme pequeña, humilde, de descubrir quién soy y a qué estoy llamada por el Señor, a servir, para construir un mundo más humano y más justo.
En este camino de 37 años en Fondacio, he descubierto mi vocación profunda que es el llamado a entregar mi vida al servicio de los más vulnerables, los más postergados de nuestra sociedad.
Es un camino que me hace feliz, descubro el rostro del Señor sufriente, puedo tocar las heridas, pero también veo un rostro alegre, con esperanza, fuerza, con capacidad de soñar y trabajar por ese sueño.
Soy testigo como el amor en el servicio pone de pie a las personas.
Lo que deseo es que podamos escuchar más los gritos del mundo con mucha oración y lecturas, donde todos tienen su espacio; vencer los miedos que paralizan, atreverse, arriesgar para avanzar.
Fondacio tiene las puertas abiertas, donde las personas entren a beber de la novedad, belleza creatividad y espiritualidad, que tengan un espacio para crear y trabajar en los sueños y sean apoyados. Que Fondacio sea una Luz para la renovación de la sociedad y de la Iglesia. – Anónimo.
Amistad, encuentros, relaciones, intercambios, interculturalidad.
Amistad, encuentros, relaciones, intercambios, interculturalidad.
Comunidad de fe en misión al mundo. Fecunda en dones del Espíritu y movida en el Evangelio como testigos ante el mundo. – Gustavo López.
Aquí encontré un camino que le dio un nuevo sentido a mi vida. Un camino que lo he recorrido con otros.
Fondacio eres mi segunda casa. Te conocí cuando pasaba un momento muy difícil en mi vida. Acá me mostraron el rostro amoroso de Dios, creyeron en mí.
Aquí encontré un camino que le dio un nuevo sentido a mi vida. Un camino que lo he recorrido con otros.
Estoy feliz y agradecida de formar parte de esta caravana que busca construir un mundo más humano y más justo, que no lo hace de cualquier manera. Busca hacerlo a la manera de Jesús, que sale al encuentro de las personas, sin importar de dónde vienen, porque cree profundamente en la belleza de todo hombre o mujer. Gracias Fondacio por haberte encontrado en mi camino.
Deseo que muchos otros te conozcan y puedas ser luz en su camino, para que encuentren un verdadero sentido a sus vidas. Que no pierdas ese sello que te caracteriza de ser una comunidad abierta, acogedora, alegre, que ama la belleza; que con su metodología toca lo profundo del corazón de la persona; ahí donde habita Dios, y que se atreve a avanzar para ir a la escucha de los gritos del mundo.
Deseo que seas puente para el encuentro de las distintas realidades que hay en nuestro país. Deseo que puedas encender el fuego en muchos jóvenes para que te den continuidad y enriquezcan esta preciosa obra que ha marcado a tantos que han pasado por ti, Fondacio. – Consuelo Silva.
Aquí aprendí a recibir a cualquier persona y hablarle de ese Dios amoroso, no castigador, que llevo bajo la piel y en mi corazón.
Desde que ingresé a Fondacio, hace casi 30 años, solo he recibido muestras de cariño y respeto. Nadie me preguntó si era católica, atea o agnóstica, ni siquiera si creía en algo. Como luterana que fui bautizada, la cálida acogida en ese Weekend A, en Punta de Tralca, los hermanos católicos me han enriquecido y marcado para siempre. Encontré amistades que perduran hasta hoy y, por sobre todo, un Dios que me puso de pie y en el cual creo y sigo fiel.
Quisiera sacarle más provecho a los terrenos, a la infraestructura de Huechuraba, atraer a más personas para hacer de Fondacio un lugar de oración, pero también con menos angustias económicas.
Lo que tenemos ahí es una fortuna, y un tesoro y no solo en lo material, sino que espiritual.
La pedagogía para compartir esa espiritualidad es única y muy didáctica. Me enseñó a ser paciente para escuchar al otro, sin interrumpir. Y las canciones, sus letras, me acompañan en todo momento y actividad.
Aquí aprendí a recibir a cualquier persona y hablarle de ese Dios amoroso, no castigador, que llevo bajo la piel y en mi corazón.
Me hacen falta reuniones de grupos chicos en vivo y en directo, no solo virtuales. Y por qué no, ¡otro Weekend A! – Gerty Knaack.
Te agradezco el poder caminar junto a otros hermanos, aprendiendo unos de otros y aceptándonos tal como somos.
Fondacio, te agradezco el reencuentro con mi padre Dios y las gracias de tenerlo en mi vida.
Te agradezco el poder caminar junto a otros hermanos, aprendiendo unos de otros y aceptándonos tal como somos.
Te deseo, Fondacio, que conserves siempre tus espacios de comunidad para seguir siempre fuertes en la fe. Que podamos seguir compartiendo con muchos otros, dándonos a conocer ya que solos no podemos, pero con otros si. – Ana María Escobar
Fondacio, lo más importante que obtuve de ti fue un encuentro personal con Jesucristo que cambió el rumbo de mi vida.
Fondacio, lo más importante que obtuve de ti fue un encuentro personal con Jesucristo que cambió el rumbo de mi vida.
Conservo y valoro cada uno de los encuentros en Comunidad, el crecimiento personal a través de las sesiones PRH y los diferentes lugares de crecimiento que me fueron mostrados a lo largo de mi participación en la Fundación.
De manera particular conservo la experiencia durante los periodos de evangelización donde podía entregar todo lo descubierto en este camino a otras personas.
Fondacio, te deseo reencontrar la esencia y el don, la espiritualidad con que fuiste fundado. – Raquel Torres Olivares.
Fondacio: Atrévete, Arriesga, Confía.
¡Comunidad de Fondacio tengo tanto que agradecerte!
La mayor gratitud por haber encontrado el Amor en el fondo de mi corazón y de mi ser. Una sensación permanente de estar “llenita”.
Ser con otros, con un sentido de pertenencia y con relaciones profundas, verdaderas, sencillas y alegres al mismo tiempo. La compañía en la búsqueda de mi misión en la vida; de ¿para qué estoy en el mundo? Vivir una vida con sentido.
Fondacio, te agradezco los vínculos que traspasan la existencia en la tierra y la confianza para transitar por lo incierto.
Te agradezco una mirada renovada de las crisis. Te agradezco ese misterio que es la experiencia del Espíritu Santo.
Para los próximos 40 años te deseo mucha apertura a la diversidad y un espíritu inclusivo en la dimensión humana y espiritual. Que integres proyectos y comunidad, la ayuda a través de acciones solidarias y el encuentro profundo de Dios al interior de nosotros; la contemplación y la acción. Te deseo la materialización de proyectos en el terreno de Fondacio. Alianzas.
Fondacio: Atrévete, Arriesga, Confía.
– Cecilia Violic.
Reconocí que había hecho muchas cosas, y ahora en Fondacio, entendía que tenía que darme tiempo de SER
Le pedí mucho a Cristo Jesús una Comunidad y por eso me regalo Fondacio. fue difícil mi llegada, pero después de una larga conversación me dijeron -«tu eres de aquí»-.
Me impresionó ver cómo se querían las personas. Aquí había algo que no encontré en otros movimientos donde busqué, era un cariño, una preocupación por mi que me comprometía a dar pasos.
Tomé el acompañamiento, profundicé en mi relación con otras personas; fue increíble como fui caminando y desplegándome.
Reconocí que había hecho muchas cosas, y ahora en Fondacio, entendía que tenía que darme tiempo de SER
y me abrí al Señor y EL hizo en mí a través de todas estas personas. Cristo Jesús me fue abriendo caminos de encuentro conmigo misma.
Los primeros cinco años estuve callada, luego de a poco fui compartiendo con palabras lo que iba descubriendo. Luego empecé a sentir que pertenecía a esta comunidad, era mi familia. Hoy les puedo afirmar que me encontré a mi misma, soy la Patricia, la hija de Dios que El creó, y estoy viviendo la Vida, porque la vida merece ser vivida. Es un regalo de nuestro Padre querido, amado y fiel por siempre.
He prometido a Cristo Jesús seguir en este camino SIEMPRE, para que llevemos su palabra a todo el mundo.
Nunca me cansaré de dar GRACIAS a Cristo Jesús por haberme dado la comunidad de Fondacio… los quiero mucho.
Fondacio, me gustaría que Cristo Jesús te conceda la energía de su Espíritu, te fortalezca e ilumine en el caminar de discípulo. Que no olvidemos nunca que somos tus discípulos, que tu nos llamaste para transmitir tu mensaje de una nueva forma de vida y de liberación interior.
Que no nos transformemos en secretarios de Dios que “hacen cosas” sino que seamos personas capaces de llegar a cualquier rincón de nuestro Chile y del mundo para tener un encuentro con el «yo» del otro.
Así como Jesús preguntaba a quien le pedía ayuda: » ¿Que quieres que haga por ti?» deseo que Fondacio abra caminos para ayudar integralmente a cada persona que lo necesite. Y que el Señor te continúe iluminando con su Espíritu en esos nuevos caminos. – Patricia del Sol.
Fondacio, te agradezco todo el camino recorrido en estos más de 20 años.
Fondacio, te agradezco todo el camino recorrido en estos más de 20 años.
Hoy miro con nostalgia mi primer Wekend A.
Te deseo lo mejor para los nuevos tiempos que vienen y si es posible retomar herramientas de nuestros inicios que siento que se han perdido, como eran los juegos escénicos, el “Paso”, etc. – Sergio Sanhueza.
Fondacio, hoy te agradezco la gracia de poner las enseñanzas de Jesús al centro de mi vida, la gracia de caminar junto a otros en comunidad y la gracia de trabajar sirviendo a otros,
Fondacio, hoy te agradezco la gracia de poner las enseñanzas de Jesús al centro de mi vida, la gracia de caminar junto a otros en comunidad y la gracia de trabajar sirviendo a otros,
en la misión del COH para personas en situación de discapacidad.
Fondacio, te deseo para los próximos 40 años que seas un lugar inclusivo de acogida, de reflexión y crecimiento espiritual, de solidaridad efectiva, donde se desarrollan programas sustentables, abiertos a las redes de apoyo y a las alianzas que potencian las acciones. – Mónica Espinoza.
Agradezco a los que iniciaron esta aventura, que me ha permitido vivir una vida con sentido al servicio de los demás, en el seguimiento de mi Señor.
Agradezco a los que iniciaron esta aventura, que me ha permitido vivir una vida con sentido al servicio de los demás, en el seguimiento de mi Señor.
Fondacio, te deseo que vivas más de la espiritualidad que nos fue regalada, que cumplamos con nuestro propósito. – Lisette C.
Fondacio contigo conocí al Dios Amor, encarnado en muchas personas de la comunidad. Me sentí unida a la caravana en que intentábamos seguir el camino al que nos invitaba Jesús.
Fondacio contigo conocí al Dios Amor, encarnado en muchas personas de la comunidad. Me sentí unida a la caravana en que intentábamos seguir el camino al que nos invitaba Jesús.
En la comunidad Fondacio viví la experiencia de ser acogida, solo por el hecho de ser yo misma, sin condiciones ni prejuicios.
Te deseo seguir mostrando al Dios Amor, basado en el mensaje de Jesús e invitando a personas a vivir en comunidad, como una forma diferente y significativa para estos tiempos. – María Isabel Pérez de Arce.
Fondacio, te agradezco darme la oportunidad de vivir, a través del Diplomado Internacional de IFF América, una experiencia única que todo ser humano debe tener la posibilidad de sentir; conocerse a sí mismo, conocer su contexto y actuar.
Fondacio, te agradezco darme la oportunidad de vivir, a través del Diplomado Internacional de IFF América, una experiencia única que todo ser humano debe tener la posibilidad de sentir; conocerse a sí mismo, conocer su contexto y actuar.
Te agradezco, también, los lazos que cree más allá de las fronteras y todas las experiencias que experimenté en el centro de Fondacio Chile.
Deseo que sigas creciendo como comunidad y que tu objetivo pueda llegar a más personas. – Adi Zapata.
Fondacio, para mí has sido una luz permanente, que ha iluminado gran parte de mi vida. Un lugar de acogida, formación, donde lo que aprendo, lo comparto, lo llevo a otros, con mi color y carisma.
Fondacio, para mí has sido una luz permanente, que ha iluminado gran parte de mi vida. Un lugar de acogida, formación, donde lo que aprendo, lo comparto, lo llevo a otros, con mi color y carisma.
Fondacio eres como una gran consulta médica, con muchos especialistas. Siempre hay uno, para mis carencias, ya sean espirituales o intelectuales. Algo que me nutre y complace es tu espiritualidad de bendición.
Gracias Fondacio, nos vemos hasta que nuestro Dios lo disponga.
Bendecido aniversario.
Que sigas levantando personas, con ternura, amor, pero también con exigencias de mejor amar, ser, y dignas. – Silvia Pérez Caris.
Fondacio, eres lugar Sagrado que acoge a todas las personas que buscan la paz para sus vidas.
Fondacio, te agradezco el camino que me has permitido hacer en estos 40 años. Eres mi comunidad y mi familia espiritual. Mi vida cambió a partir del primer Weekend A, en julio de 1980.
A través de tu pedagogía me di cuenta que este cambio no era posible sin iniciar un proceso de formación y transformación interior: «No habrá mundo nuevo sin hombres nuevos, que se dejen transformar».
A través del trabajo pastoral experimenté la alegría de servir a otros y la capacidad de ponerme de rodillas frente a los que vivían marginación y falta de oportunidades.
En Fondacio encontré a un Dios cercano, que estaba en mi interior, descubrí la belleza de la creación y una Comunidad que invitaba a todos los hijos de Dios, (ricos, pobres, jóvenes, adultos, viejos, niños, discapacitados, etc.).
Me permitiste hacer un camino de reconciliación con mis raíces. Me Enseñaste a perderle el miedo a lo desconocido, salir del confort, para acompañar a personas que trabajaban en las ollas comunes, para darle de comer a muchos en tiempos difíciles que vivíamos como país. Me hice hermana y amiga de muchos. Ni la mejor universidad me habría enseñado todo lo que aprendí trabajando en la población Héroes de la Concepción.
Contigo encontré el sentido que buscaba para mi vida, experimenté la misericordia y a velar por el bien común, a vivir la radicalidad dentro de mis posibilidades. Me atreví a soñar con más novedad para mi vida y para los demás impulsando nuevas comunidades de jóvenes y programas PDS.
Fondacio, te deseo que sigas siendo una Comunidad Cristiana, radical servidora, comprometida socialmente.
Una comunidad que invita a sus participantes a vivir la formación- transformación, para realizar un servicio que entregue respuesta a las necesidades de la sociedad actual. Que seas una comunidad que vive un enraizamiento en Jesucristo, que trabaja para jóvenes, adultos, mayores, niños, discapacitados, etc.
Que sigas llamando a la radicalidad. Un movimiento que vive en alianza y amistad con la sociedad, con su entorno, con instituciones que trabajan por la puesta de pie de los hombres y mujeres.
Fondacio te deseo que puedas llevar a cabo tu proyecto con el terreno Centro los Almendros, con una Acogida fraterna en su entrada. Con infraestructura que permita a los proyectos sociales desplegarse al servicio de muchos que lo necesitan. Que exista un espacio para vivir la formación-transformación, la vida comunitaria, Lugar de encuentro entre personas de diferentes estratos sociales, para vivir la diversidad y comunión de los hijos de Dios.
Fondacio, eres lugar Sagrado que acoge a todas las personas que buscan la paz para sus vidas.
Lugar que irradia mística, espiritualidad, belleza, servicio, entrega. Lugar Luz para la ciudad. – Elba Muñoz.
Fondacio, te conocí este año y doy gracias por eso.
Fondacio, te conocí este año y doy gracias por eso.
Durante este tiempo, el mayor don que me ha sido dado es hallar la Paz del Señor.
Te deseo que sigas con tu labor, cada vez más de la mano del Señor y llevando su mensaje a todos los rincones de la tierra. Que crezcas en América Latina y el resto del mundo. – Anónimo.
Fondacio, me encanta la alegría que encuentro en ti, la cercanía, el cariño, las ganas de ir más allá, el servicio a los más desposeídos.
Fondacio, te agradezco tu mirada integral sobre el ser humano, desde una perspectiva espiritual, emocional y humana.
Fondacio, me encanta la alegría que encuentro en ti, la cercanía, el cariño,
las ganas de ir más allá, el servicio a los más desposeídos.
Con todos los medios ofrecidos en Fondacio, he crecido como persona en mi psiquis y en mi alma, y eso lo agradezco infinitamente porque he podido ir descubriendo mi verdadero rostro y ser feliz en el proceso.
Deseo que sigas fiel al llamado de ayudar a los demás, a ponerse de pie en su unicidad, y seguir fieles a Dios y a las inspiraciones del Espíritu Santo, que es el único camino que nos dará la verdadera felicidad. – Jane Meehan.
Fondacio: Ser con Dios, ser con uno y ser con otros.
Fondacio: Ser con Dios, ser con uno y ser con otros.
La vida comunitaria y la formación en la espiritualidad de Fondacio.
Fondacio, que sigas siendo como la semilla de mostaza, que es la semilla más pequeña, y cuándo se siembra crece, y echa ramas grandes y las aves pueden anidar en ellas.(Mc 5, 30-32). – José Ramoneda C.
Fondacio, eres un alimento constante y creciente en el Amor a Cristo.
Fondacio, eres un alimento constante y creciente en el Amor a Cristo.
Eres despertar a una nueva vida con el Señor. – Carmen Lepeley.
Te agradezco Fondacio por mostrarme un Dios amoroso, amigo y misericordioso.
Te agradezco Fondacio por mostrarme un Dios amoroso, amigo y misericordioso.
Te agradezco el formarme humana y espiritualmente para ser instrumento de amor, nutriéndome y enriqueciéndome por la vida compartida, potenciándonos e impulsándonos a todos quienes participamos de la comunidad para salir al encuentro de otros. – Anónimo.
Fondacio, aquí recibí el empoderamiento laico.
Fondacio, aquí recibí la alegría de trabajar con belleza por otros, crear hechos nuevos para iluminar el mundo con el rostro colorido de Jesús.
Recibí una profunda raíz en el Espíritu Santo que revolotea de tantas maneras en los acontecimientos de mi vida y la vida social.
Aquí recibí la impronta del servicio y del diezmo, no hay vida espiritual real si no se es obrero del mundo nuevo. Recibí la humildad del acompañamiento y la vida comunitaria.
Fondacio, aquí recibí el empoderamiento laico.
Aquí recibí relaciones profundas de Alma que perduran hasta hoy, una forma de conversar y de ser con otros genuina, vulnerable, noble… mucho de lo que soy se lo debo a la Luz, el Amor y el Poder de Dios materializado en lo que Fondacio hizo por mí por 25 años. – Marcelo Santa María.
Fondacio, me cambiaste la mirada sobre mí misma y sobre mi prójimo.
Fondacio, me cambiaste la mirada sobre mí misma y sobre mi prójimo.
Me cambiaste la mirada sobre qué entender por «Dios», sobre el «Pueblo de Dios», y sobre «un mundo nuevo».
Conocí la Libertad, mi capacidad de ir al fondo del amor por el prójimo y de entregarme entusiastamente en la responsabilidad y las animaciones, en cómo me inspiraba el Espíritu Santo. – Piru Richard.
Fondacio, doy gracias por la pedagogía en el encuentro, la belleza, el canto, la oración, el acompañamiento, la diversidad.
Fondacio, doy gracias por la pedagogía en el encuentro, la belleza, el canto, la oración, el acompañamiento, la diversidad.
Todo lo anterior me permite reconocer el rostros del Señor en cada persona.
Has sido un camino de conversión potente, de despojarme de la mochila de tantas cosas que no me ayudaban a ser yo verdaderamente, de hacerme pequeña, humilde, de descubrir quién soy y a qué estoy llamada por el Señor.
He descubierto mi vocación profunda que es el llamado a entregar mi vida al servicio de los más vulnerables, los más postergados de nuestra sociedad. Es un camino que me hace feliz, descubro el rostro del Señor sufriente, puedo tocar las heridas, pero también veo un rostro alegre, con esperanza, fuerza, con capacidad de soñar y trabajar por ese sueño. – Anónimo.
Gracias a Fondacio pude conocer a un Dios que me quiere por lo que soy,
Gracias a Fondacio pude conocer a un Dios que me quiere por lo que soy,
independiente de lo que hago, encuentro con laicos y laicas de toda condición social y diversas culturas y religiosidades que en comunidad local y mundial nos acompañamos en seguir a Jesús del evangelio, con Conciencia de ser parte de un pueblo que en caravana Inter generacional busca constantemente actualizar la fe de acuerdo a los tiempos, lugares y personas. – Raúl Troncoso.
Gracias, Fondacio, por enseñar a relacionarme con un Dios amoroso, que me habla al corazón, sentirme hija amada, por este lugar sagrado de comunidad,
Gracias, Fondacio, por enseñar a relacionarme con un Dios amoroso, que me habla al corazón, sentirme hija amada, por este lugar sagrado de comunidad,
que me contiene, que es alegre , orante, en una dinámica creativa, dejándonos guiar por los pastores que pasaron dando su energía, vitalidad, abandono, para que este lugar de iglesia fuera respuesta de Dios en el mundo, con proyectos sociales que nos permiten involucrarnos con la realidad. – Ximena Lobos.